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HARPETH RIVER cobró venganza en Sotelo

Nota Oficial.- Ante la ausencia del favorito Figrel, caballo que le arrebató la gloria en Clásico del Charro, Harpeth River de Cuadra AG se engrandeció y con paso devastador superó a sus rivales en el Clásico Zacatlán. El caballo importado de cuatro años esperó paciente atrás de los punteros, y en la curva final, a la orden de su jinete Gabriel Morales, comenzó a devorar metros para dejar atrás con facilidad a sus adversarios.

El atleta, entrenado por Antonio Silva Olvera, ya había demostrado su gran potencial de velocistas. A los dos años capturó el Clásico Ciudad de México, y el Clásico Anáhuac. Aunque a sus tres años tuvo discretas actuaciones, en la presente campaña se muestra con poder para los compromisos venideros. Harpeth River concluyó la distancia de los 6 furlongs, mil 207.01 metros en un minuto 11 segundos y tres quintos.

Sangre de Rey

En su primera presentación con las sedas de Rancho Don Memo, Ikal no se tentó el corazón y dominó a placer, de punta a punta, el I Premio Comité Mexicano de Arbitraje de Carreras de Caballos y Galgos A.C.  competencia en honor al órgano que en 2023 rige las batallas de equinos en Sotelo.

Ikal tiene sangre de campeón, pues su padre es Animal Kigdom, caballo que corrió 12 pruebas, ganando cinco de ellas, en las que destacan el Derby de Kentucky y la multimillonaria Dubai World Cup. Esta noche el pupilo de Raúl Rangel logró su primera victoria de la temporada, desplazándose en los 6 furlongs en un minuto 12 segundos.

Y el caballo no fue el único triunfador, pues el Comité Mexicano de Arbitraje le otorgó un premio de cinco mil pesos al caballerango de Ikal, José Luis Vega, como reconocimiento a su labor en el cuidado del ejemplar.

Ochenta años de ser un Gigante

El Hipódromo de Las Américas llegó a sus ocho décadas, 80 años en los que ha vibrado por los gritos de los miles de aficionados que han abarrotado sus gradas. Esta tarde se celebró un festejo más, con un pastel de 400 kilos, música, baile y cargado con la adrenalina de las llegadas cardiacas en la pista. 80 años y aún con mucho camino que recorrer.

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